Crónica por Eric Fortino , Foto de portada de Sepultura por Eliana Fernadez
En un tour por sus 40 años de trayectoria, una de las bandas más grandes e icónicas del metal volvió a Buenos Aires con la intención de remarcar toda su historia en un potente show. El estandarte brasileño, Sepultura, nos visitó en su gira despedida “Celebrating Life through Death” y, junto a ellos, el thrash norteamericano y explosivo de Death Angel en el mítico Teatro Flores, organizado por Icarus en colaboración con CKConcerts.
Un día nublado y con algunas garúas que van y vienen nos acompañan al emblemático templo metalero de Avenida Rivadavia este domingo 21 de abril de 2024, que, al llegar, muy poco de domingo tiene con la cantidad de remeras negras, chalecos de jean y camperas de cuero que rondan en los alrededores. Con la capacidad bastante ocupada por ser la primera banda de la noche, la gente recibe con el puño al cielo a los únicos representantes de los argentinos: Se trata una vez más de REINARÁ LA TEMPESTAD, proyecto relativamente nuevo destinado a revivir los primeros discos de Horcas con varios de sus ex integrantes. Los primeros pogos se fueron dando a medida que avanzó el show y el público ya empezó a calentar motores para lo que se viene. Con una última tosida icónica de la canción “Devastación” del disco de 1980, Reinará saluda a su gente de forma correspondida luego de 30 minutos de show.
El bloque internacional va cayendo como la bandera que está detrás del escenario, mostrándonos de a poco un arte de tapa violento y bestial que sigue bajando para deslumbrarnos con su logo. Bien grande y de punta a punta, DEATH ANGEL es lo que leemos mientras una introducción melodiosa de guitarras acústicas y eléctricas suena y es cortada abruptamente por el machaque Thrash de Ted Aguilar, guitarrista rítmico de la banda, interpretando “Lord of Hate” de su gran álbum “Killing Season”. Con ese comienzo de show y siguiendo el hilo del mismo, el thrash death de los norteamericanos nunca cesó, llevado bien al frente con la increíble voz de su frontman Mark Osagueda que llegaba a unos impresionantes y muy bien aplicados agudos. Quiero destacar la notable antítesis entre los guitarristas, quienes eran muy parecidos, pero con actitudes totalmente diferentes: Ted Aguilar, con un peluche de koala sobre su equipo, machacaba a diestra y siniestra en una pose fría y concisa, siempre mirando con una expresión furiosa muy sincronizada con la pesadez de sus golpes. Y por otro lado, en total contraposición con Ted, Rob Cavestany deambulaba de un lado a otro eufórico y errante, siempre con una sonrisa en su rostro demostrando que lo estaba disfrutando muchísimo al tiempo que relucía sus mejores solos de guitarra. Todo esto frente a su muñeco de Godzilla sobre su equipo, detalle muy importante en contraste al koala de Ted, haciendo alusión a mi parecer de sus distintas personalidades.
Al final de una de sus canciones, Mark nos demuestra lo emocionados que están por estar de vuelta en Argentina después de 13 años y medio, remarcando que si fuera por ellos habrían vuelto la segunda noche después de su último show. El cantante hizo mucho hincapié en lo importante que son los argentinos para ellos en cuestión de inspiración y motivación. Con la gente prendida fuego por sus palabras, “The Dream Calls for Blood” genera uno de los mosh pits más violentos hasta el momento, pero no el más grande de su show, ya que la canción con la que se despidieron fue “Thrown to the Wolves”. Desafortunadamente, en este evento, se perdió el elemento sorpresa. Tras las actuaciones de Reinará la Tempestad y Death Angel, el mágico telón que separa a nuestros ídolos del público permaneció abierto. A pesar de conocer el orden de las bandas, nos encontramos pasando el tiempo entre actuaciones contemplando el escenario y las banderas, en lugar de anticipar el próximo acto con la emoción del suspenso y los check de los músicos preparándose para darlo todo. Sin embargo, la ansiedad ya se denotaba entre los presentes con sus pies inquietos que dieron un abrupto salto al escuchar grandes introducciones de varios discos como en una especie de “Medley” introductorio a lo que logramos divisar saliendo de entre las tinieblas al gran Andreas Kisser y explotamos de energía. SEPULTURA ya estaba frente a nosotros, y qué mejor para abrir este ansiado show que “Refuse/Resist” y, sin respiro alguno, “Territory”. El setlist de los gigantes brasileños tuvo un total de 19 canciones de 10 diferentes discos, por lo que la variedad fue realmente interesante… En realidad, para los grandes fanáticos del viejo Sepultura con Igor y Max Cavalera esta variedad fue un poco decepcionante, ya que quedaron afuera muchos clásicos como “Dead Embryonic Cells” y “Beneath the Remains” (Al final de esta nota te dejo el setlist agrupado por discos). Justo antes de “Means to an End”, en una decisión muy acertada, Derrick Green, frontman de la banda, presentó a su nuevo baterista Greyson Nekrutman quien castigó la batería demostrando que está a la talla. Greyson es un influencer de 19 años (Ex Suicidal Tendencies) que está reemplazando a Eloy Casagrande, quien dejó la banda para seguir con sus proyectos, en esta gira despedida.
Tuvimos dos ocasiones para disfrutar de la destreza de Andreas Kisser con la guitarra electroacústica, en Ratamahatta y Kiowas, siendo esta última una fiesta tanto arriba como abajo del escenario, ya que los músicos de Death Angel (Salvo su bajista) fueron invitados a acompañarlos en la percusión de esta canción.
Por supuesto, no podía faltar la canción por la que todos conocimos Sepultura, e incluso, por la que muchos empezamos a apreciar el metal de otra forma. “Roots Bloody Roots” fue el cierre violento de esta noche destinada a ser una despedida de la que en ningún momento se hizo mucho hincapié, pero que posiblemente muchos llevarán en sus memorias al escuchar esta milenaria banda.
Álbum «Chaos A.D.» (1993):
Album “Roots” (1996):
Álbum «Kairos» (2011):
Álbum «Arise» (1991):
Álbum «Beneath the Remains» (1989):
Álbum “Schizophrenia” (1987):
Álbum «Against» (1998):
Álbum «Dante XXI» (2006):
Álbum «Quadra» (2020):
Álbum “Roorback” (2003)
Mind War
Galeria de DEATH ANGEL por Eliana Fernadez
